Historia CIZ

Academia Comercial Ignacio Zaragoza


Tras la tormenta llega la calma y con ella aparece sobre el horizonte un arco iris resplandeciente de esperanza, de futuro promisorio. Los que pusieron los cimientos del colegio tuvieron imitadores y lucharon por hacer más y mejor . El 30 de noviembre de 1939 resultó una fecha altamente alentadora para la “Academia Comercial Ignacio Zaragoza”, nombre que recibió al iniciar la enseñanza Secundaria incorporada y abierta en enero de 1940. La noticia de la incorporación Federal de la Primaria , y la enseñanza Comercial la recibe del Estado. En esta misma fecha se instalaron en el local que ocupaba el “Asilo de la Inmaculada Concepción”


 




Colegio Ignacio Zaragoza


Renació la vida lasallista en nuestra ciudad. Con mucha suerte el curso 1940-1941 inició sus actividades que seguiría desarrollándose en paz y progreso por muchos años. La enseñanza Secundaria sustituye paulatinamente a la comercial por ser más deseada por las familias y más adaptada a las necesidades del lugar. La era de la prosperidad empieza para el “Ignacio Zaragoza”. Ya tiene, en diciembre de 1940, 261 alumnos. Terminaron los días nefastos en que había que esconderse en las torres de la catedral para educar a los Saltillenses. Para 1943 el nombre oficial de la “Academia” se transforma en el de “Colegio Ignacio Zaragoza”. La labor de cristianización desde 1937 había sido intensa valiéndose en particular del escultismo. Ya desde el primer año, se formó una congregación con base en la educación scout. Tomó pronto grandes proporciones y hubo que organizar los “lobatos” para los más jóvenes. En una reseña anual, el H. Director Andrés Treviño habla de su labor de catequesis a los barrios de la Ciudad , y de vocaciones destinadas al seminario de Monterrey y a Tacubaya. En el último año, el H. Director no menciona a los scouts pero cita dos grupos apostólicos cuyos nombres son nuevos: “Centro de Estudios” y “Club Deportivo”, nombres tomados a partir de una reglamentación del escultismo en 1941 para todos los colegios lasallistas.







Un proyecto grandioso para el Colegio Ignacio Zaragoza


El futuro lasallista en Saltillo se presenta halagüeño: familias ansiosas de educación integral para sus hijos, jóvenes llenos de vitalidad y con espíritu de servicio, maestros entregados a su ministerio, una comunidad de Hermanos que vive con fervor su vida religiosa. En el año de 1943 el Hno. Cesáreo Boillot, Director del Colegio, se propuso fundar un gran Colegio moderno con internado. Un bienhechor donaría el terreo, el Sr. Obispo a la cabeza y con los padres de familia financiarían la construcción, pero había una condición: sostener una escuela gratuita de 400 alumnos en el antiguo local de la calle de Hidalgo. El proyecto se presentó al Consejo General de los Hermanos. Después de admirar la disponibilidad de tanta gente generosa y de hacer un buen estudio de la situación económica del Instituto, el Consejo tuvo que rechazar esta oferta, encontrando demasiado difícil la responsabilidad de sostener una escuela gratuita de esta importancia.







Crecimiento de obra Lasallista en Saltillo


La población estudiantil crecía, 15 años más tarde se presentó nuevamente la oportunidad de trasladarse a otras instalaciones. Es el Hermano Director en 1958, Luciano Ríos ex alumno del “Asilo”, quien organiza un patronato e inicia la construcción de un edificio moderno, funcional y muy amplio en la Colonia la Salle. La inauguración de las nuevas instalaciones estuvo a cargo del H. Director Francisco Alva en el año de 1961. A partir de 1961 y hasta la fecha el CIZ se ha transformado y actualizado constantemente. Cada Director, apoyado siempre por el personal docente, administrativo e intendencia, así como por todas las familias, ha contribuido de manera significativa en el crecimiento del Colegio.







Hermanos Directores de 1937 - 2007







De cara al presente


Recordar el pasado es compromiso personal con el presente. Los surcos trazados y sembrados durante ya tantos años permiten contemplar ricas cosechas. Así es para toda obra de educación, tanto en la familia como en la escuela: sembrar, cultivar… y esperar que la cosecha se logre. Y el árbol sembrado con paciencia, tenacidad, perseverancia y alegría se ha ramificado. En Saltillo se vive una gran efervescencia lasallista; en el CIZ se atienden los diferentes niveles educativos, desde el preescolar hasta la preparatoria, pero además se suma a este crecimiento, la fundación de distintas obras gratuitas, la preparatoria vespertina (1985), la Casa Hogar de los pequeños “San José” (1998) , la Escuela Primaria La Salle (2003), y la obra más reciente, que después de vivir la excelencia en la educación básica en Saltillo abre sus puertas a la educación superior “Universidad La Salle Saltillo (2005)”. La verdadera Iglesia es la de aquellos que desde esta tierra dan un testimonio y quieren ser UNO en Jesús. Así ha sido la obra lasallista, Hermanos y Maestros que han pasado por nuestra institución, que nos repiten clamorosamente: “Lo que San Juan Bautista de la Salle hizo y nosotros hemos alcanzado al pisar sus huellas, ¿por qué no lo harán ustedes, sus sucesores en el ideal lasallista? Ignacio Zaragoza, Colegio invicto y triunfante, por ti han entregado su vida, sembradores de esperanza. En esta nueva etapa, la fe, el amor y la tenacidad de los responsables serán las columnas del edificio lasallista Gracias por las miles de vidas que al dar la vida, sobre el surco quedaron sembradas. Gracias a los Hermanos franceses por haberse transplantado a nuestra patria y, sobre todo, gracias a Dios y a la Salle por el bien realizado en estos primeros cien años.





La estrella sigue marcando caminos, abriendo sendas. La Salle espera confiado… habrá un nuevo amanecer… Que al fin la cruz será también signo de que el rumbo es el de Dios ¡ La Salle ! Sigue su peregrinar.